Luz de advertencia de combustible
Tan pronto como esta pequeña luz indicadora con forma de bomba de combustible se enciende en el tablero, es una señal que no se debe ignorar. Te dice que tu tanque se está acercando a la reserva. Aunque algunos vehículos todavía pueden circular algunos kilómetros después de su aparición, lo mejor es encontrar una estación de servicio rápidamente.
El motor da tirones
Cuando el combustible comienza a escasear, es posible que el motor no reciba la cantidad necesaria para funcionar correctamente. Una sacudida desagradable es una señal de que el motor está teniendo dificultades para obtener el combustible que necesita. Si sentís estas sacudidas es una clara señal de que necesitas cargar nafta.
Apagado completo del motor
Éste es el síntoma más evidente, pero también el más problemático. Si, a pesar de otras señales de advertencia, continuás manejando, el motor podría detenerse por completo. En este caso, te has quedado sin nafta y es imprescindible que te pongas a salvo y busques ayuda.
Las consecuencias de conducir en la reserva
Conducir con reserva es un hábito que muchos de nosotros hemos adoptado, a menudo por falta de tiempo. Sin embargo, esta práctica, que no está exenta de consecuencias, no es recomendable en la autopista. Cualquiera sea la situación, conducir en reserva puede dejarte varado al costado de la autopista o ruta, además de afectar la mecánica de tu vehículo.
Desgaste prematuro del sistema de combustible
Cuando el nivel de combustible es bajo, el tanque puede absorber suciedad o residuos. Estas partículas pueden dañar la bomba de combustible y obstruir los filtros, provocando un desgaste prematuro.
Riesgos para el motor
Conducir habitualmente con la marcha atrás puede provocar daños en el motor. De hecho, el combustible también desempeña un papel refrigerante para determinadas partes del motor. Por lo tanto, un nivel bajo puede provocar un sobrecalentamiento.
Problemas de arranque
Un tanque casi vacío puede causar problemas de arranque, especialmente en clima frío. El combustible puede tener dificultades para llegar al motor, lo que dificulta el arranque.
Costos adicionales
Si las impurezas dañan el sistema de combustible o el motor, las reparaciones pueden ser costosas.
Riesgo de quedarse sin combustible
Éste es el riesgo más obvio. Si ignorás la luz de advertencia de combustible, corrés el riesgo de quedarte varado, lejos de una estación de servicio.
¿Qué hacer si tu auto se queda sin nafta?
Es el escenario que todo conductor teme: quedarse sin nafta en un lugar inesperado, como en medio de la ruta. Si esto te sucede, no te asustes. Aunque la situación pueda parecer estresante, hay medidas sencillas que podés tomar para garantizar tu seguridad y la de los demás.
Ponete a salvo
Tan pronto como sientas que tu automóvil comienza a debilitarse, encendé las luces de emergencia. Si es posible, manejá hasta un lugar seguro para estacionar. Evitá detenerte en el carril de circulación.
Reportá tu presencia
Una vez detenido y seguro, salí del vehículo por el lado opuesto al tráfico. Colocá el triángulo de advertencia al menos 30 metros detrás de tu vehículo para advertir a otros conductores. No olvides ponerte el chaleco amarillo.
Evitá reinicios innecesarios
Si estás seguro de que se ha quedado sin nafta, no intentes reiniciar el vehículo repetidamente. Esto podría dañar el motor.
Resguardarse
Si estás en un carril rápido o en una autopista, es más seguro pararse detrás de las barandillas. Evacuá a todas las personas a bordo y esperá a que llegue la ayuda, especialmente si las condiciones climáticas son malas.
Pedir ayuda
Después de refugiarse, llamá primero a la policía para que puedan asegurar el tráfico. Una vez notificado, podrás ponerte en contacto con tu proveedor de asistencia vehicular.