Manejar por autopista puede ser una experiencia muy agradable y segura cuando lo hacés de forma responsable, pero es muy diferente a conducir por la ciudad. Requiere precaución y vigilancia adicionales, por eso, lo primero a tener en cuenta es que el vehículo se encuentre en buenas condiciones físico-mecánicas para garantizar el óptimo rendimiento durante el traslado.
Te recordamos los aspectos básicos de seguridad vial que debés seguir para ponerte al volante: Acomodá los espejos, usá el cinturón de seguridad, evitá distracciones, respetá los límites de velocidad establecidos y no tomes alcohol o cualquier sustancia que comprometa tu estado de alerta.
En tu primer viaje por autopista optá por lo siguiente:
- Manejá en un día con buen clima, de esta manera evitarás los inconvenientes ocasionados por la lluvia, la niebla o cualquier otro factor que pudiera influir en la conducción.
- Optá por un destino cercano y que te acompañe una persona con experiencia.
- Mantené una velocidad constante respetando las máximas/mínimas establecidas. Tené en cuenta que circular a baja velocidad por la autopista también es peligroso.
- Circulá por el carril de extrema derecha. Posiblemente los nervios de la primera vez estén al máximo, por eso te recomendamos circular por el carril de baja velocidad para entrar en confianza y evitar la presión de otros vehículos.
- Mirá a través de los espejos frecuentemente, de esta manera tendrás un mejor dominio de tu entorno.
- Anticipá tus movimientos. Recordá siempre anunciar tus maniobras con las luces de giro.
Lo ideal, es que tengas experiencia previa manejando por la ciudad, de esta manera, es más fácil perder el miedo.
Y lo más importante, hacelo de forma responsable, con precaución, siempre alerta al camino y siguiendo las normas de tránsito.