La configuración de contraseñas robustas es fundamental para asegurarnos que nuestra información permanezca segura.
A continuación, te brindamos algunos consejos que pueden ayudarte a crear contraseñas largas que sean más fáciles de recordar:
- La contraseña debe estar compuesta como mínimo por 12 caracteres
- Que contenga mayúsculas, minúsculas, números y caracteres especiales
- No debe contener más de tres letras o números iguales
- No debe contener números y/o letras correlativas o adyacentes en el teclado
- No debe contener información personal sencilla de averiguar (DNI, fechas de cumpleaños, nombres de familiares, etc.)
- Es recomendable el uso de una bóveda de contraseñas, por ejemplo, KeyPass, disponible en los sitios oficiales. Podrás resguardar las contraseñas de cada uno de los servicios que utilices y utilizar una única contraseña robusta para abrirla, sumándole tus datos biométricos. Y realizar el backup de la bóveda en tu cuenta de Google Drive.
Al descargar archivos de un sitio, un correo o WhatsApp, nos exponemos a un riesgo muy alto de infección.
Podrían controlar remotamente el dispositivo, obtener acceso para conocer la ubicación geográfica, acceder a tu información personal, a tus contactos o utilizar al dispositivo con el fin de ejecutar nuevos ataques informáticos.
También podrían proceder al secuestro de tu información, instalarse aplicaciones no deseadas, que afecten el funcionamiento del dispositivo o enfrentar asuntos legales por instalar aplicaciones no autorizadas.
Te recomendamos lo siguiente:
- Descargá aplicaciones únicamente de las tiendas oficiales (Google Play o AppStore)
- Nunca accedas a links recibidos por correo o mensajes, siempre hacelo a través del sitio oficial
- No descargues adjuntos de correos recibidos de fuentes desconocidas
- Desactivá la descarga automática de adjuntos