10 consejos para manejar de noche en la ruta

Para algunos, conducir de noche es una obligación. Para otros, en cambio, es un placer. La ruta de noche es atractiva pero también riesgosa, con características y situaciones especiales que no se dan en el tránsito diurno. 

Para unos u otros, compartimos este listado de recomendaciones a favor de un viaje seguro:

Antes de emprender el viaje

1. Salir bien descansado. No se debe salir a la ruta en medio de la noche sin haber dormido previamente. 

2. Revisar el funcionamiento de las luces. Hay que chequear que funcionen todas las luces: de posición, bajas y altas, de freno, giro, retroceso, antiniebla y balizas. A la noche, ver y ser visible para los demás es la mejor defensa.

3. Limpiar los vidrios. El parabrisas, la luneta y los espejos retrovisores deben estar limpios, sin polvo ni restos. La suciedad, al ser iluminada por los otros vehículos, se transforma en un telón traslúcido que impide ver con claridad las señales y calcular la distancia respecto de los otros vehículos.

Durante el viaje

4. Bajar la luz del tablero. El tablero tiene un botón para graduar su luminosidad. Una luz tenue hará que se vea mejor lo que hay afuera: mientras más oscuro esté el habitáculo, mejor.

5. Respetar el límite de velocidad. De noche, una ruta vacía puede invitar a apretar el acelerador, pero puede ser peligroso. Siempre puede haber algún vehículo sin luces traseras encendidas o baches en la calzada. Además, muchos animales salen a cazar de noche y cruzan la ruta. Un volantazo en esas circunstancias puede derivar en un vuelco.

6. No encandilar. Las luces altas deben usarse con criterio. Cuando un vehículo se aproxima hay que bajarlas ya que el encandilamiento puede generar siniestros viales. 

7. Mucho cuidado al sobrepasar. Calcular la distancia a la que viene el auto de frente es clave. 

8. Llevar elementos para mantenerse activos. Agua, galletitas y chicles son una buena compañía. Café en vaso térmico, también. Mate no es aconsejable, porque cebarlo implica mucho riesgo por la distracción que conlleva su manipulación.

9. Música rutera. Si se viaja solo, la música acompaña. Consejo: una lista de reproducción pegadiza y remita a buenas experiencias y no una que adormezca.

10. Ventilar el auto y hacer paradas.  Cada tanto, es aconsejable bajar la ventanilla para renovar el aire del interior y detenerse en estaciones de servicio para lavarse la cara, estirar las piernas y tomar un café. 

 

Fuente de Información: Diario Clarín
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