Las baterías de litio se utilizan en equipos electrónicos (celulares, notebooks, laptops, UPS y auriculares), transporte (bicicletas, monopatines, autos y motocicletas) y en herramientas.
Las baterías de litio son dispositivos compuestos por dos o más celdas que fueron diseñados para almacenar energía eléctrica. Estas baterías son capaces de almacenar más energía en menos espacio que las demás, son livianas, de pequeño tamaño y de alto rendimiento.
¿Para qué se utilizan?
¿Cuáles son las causas de falla más comunes?
Los daños o defectos en las baterías de litio pueden ocasionar siniestros y consecuencias por la disipación del calor, incluso fuego, explosión y emisión de gases tóxicos.
Entre las causas de falla más comunes podemos mencionar:
- Cortocircuito externo: produce una generación descontrolada de calor y luego el incendio de la celda.
- Deformación o daño por colisión o vibración: genera un daño interno en el equipo originando una reacción química.
- Fuga térmica: se genera por una sobrecarga o un calentamiento externo. Este evento produce una generación de calor y emisión de gases como CO2, H2, y O2.
- Daños por agua: genera un cortocircuito interno ocasionando una generación descontrolada de calor con posterior incendio.
- Defectos de fábrica o reparación defectuosa: produce un cortocircuito interno originando una generación descontrolada de calor con posterior incendio.
¿Cuáles son las señales de advertencia?
Si detectás olor inusual, cambio de color o forma, exceso de calor, fugas, humo o falta de carga, inmediatamente dejá de manipular el equipo.
Te compartimos una serie de recomendaciones para tener en cuenta:
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