No solo son fundamentales porque tienen la capacidad de absorber CO2 y actuar contra el cambio climático, sino también porque brindan otros importantes servicios ambientales: son vitales para muchas especies de aves e insectos porque les proporcionan alimento y refugio, purifican el aire de la ciudad, embellecen los espacios y disminuyen la contaminación auditiva.
En una hectárea de árboles plantados, en promedio se produce por año el oxígeno suficiente que permite vivir a 40 personas y absorbe el CO2 emitido por unos 10 autos medianos.
El uso de combustibles fósiles y la deforestación son los principales emisores de CO2 y responsables del cambio climático, provocando inundaciones, tormentas y sequías cada vez con más frecuencia.
Los árboles nos permiten mitigar en parte estas consecuencias. Por eso, es tan importante plantar árboles y proteger y enriquecer los bosques nativos.